Rápido y sin perder el tiempo, me muevo silenciosamente por la pasarela hasta que mi retículo encuentra a otro de los dos restantes zombies, uno de ellos parece haber entrado a la tienda.Ruidos y disparos llenan de forma alternada el lugar. Antes de que el segundo consiga alcanzar su meta, apunto y disparo en dirección al cráneo de mi sucio amigo.

Los bichos se nos echaban encima.
El COE al que habían golpeado saca su pistola en la distancia corta para volarle la tapa de los sesos al zeta, mientras que los policías intentan hacer lo mismo con sus enemigos.
Poniendo el rifle en semiautomático abro fuego con cuidado de no tocar a ninguno de los hombres enzarzados en el combate. El ruido ya no importaba mucho, pues seguro que nos habían oído docenas de bichos.


ROL OFF: Encantado de continuar, ya empezaba a aburrirme...

NOTA: Jota no puede postear en un tiempo, asi que lo haré yo por él.

JOTA
Era imposible recogerles en el helicóptero, así que lo único que puedo decirles es que vayan hasta el centro comercial dondé están Ripper y los demás o hasta el Colegio La Salle.
Después apago el canal y viró el morro del helicóptero para volver al centro comercial con la unidad que tenía que cubrir.


RIPPER
Tu fusil y los disparos conjuntos de la policía destrozan a los zombies antes de que puedan moverse y atacar a nadie más. De repente la zona de abajo queda totalmente en silencio. Ripper abates tres zombies y consigues 45 de exp. No parece haber ningún zombie más a al vista....

HARTMAN
El disparo destruye al último zombie. Ganas 15 de exp. Todo queda en silencio, mientras el extraño ruido prosigue... Cuándo apuntas tu mirilla a la tienda ves cómo un hombre con sudadera se asoma a la puerta, tiene la capucha calada y un pasamontañas con lo que no le ves la cara. Además lleva un desencofrador que chorrea sangre.
Un instante después vuelve a meterse en la tienda y no puedes hacer nada.
El segundo piso parece despejado...

Una vez todo estaba tranquilo, me retiré un poco el casco y con la mano me sequé el sudor de la frente y cuello.
Ante nosotros un montón de podridos destrozados.
-Muy bien. Organizaros en equipos de dos. Cada uno con un militar y un soldado.
Registrad la parte de abajo. Coged la comida y bebida que podáis. Nada de gilipoyeces. Comida enlatada, no toquéis nada que pueda pasarse en unos días.
Coged unos carros, llenádlos y cargarlos aqui.
Tened los ojos abiertos.
Tú: dijé señalándo al nacional herido.
Vienes conmigo.
Que nos siga otro grupo y subimos al segundo piso. Cargaros todo aquello que no sea humano.
Que un equipo proteja los vehículos.
¡En marcha!
Yo, con los otros tres tíos, empezamos a subir las escaleras mecánicas...

Tras abatir al último podrido, un extraño no infectado salió de la tienda a comprobar que era todo aquel alboroto, instantes después volvió a su posición original. No parecía ser muy amigable, además, puede que no fuese el único. Me di la vuelta silenciosamente y observé como el sargento subía por las escaleras. Cogí una pequeña piedrilla de la galería y la lancé contra las escaleras para advertir mi presencia al equipo aliado que se aproximaba. Tras llamar la atención de Ripper; con varios gestos le indiqué peligro en la zona de la tienda de ropa y que avanzasen agachados.
Intentando tener mejor visual de la zona, me moví por la galería hasta estar sobre la cafetería. Desde ahí podía visualizar el interior de la franquicia y podía descender de la galería más fácilmente, en caso de tener que recurrir a ello.