Ya me imaginaba que los militares no nos traerían todo lo que habíamos pedido. De todas formas esperaba que el Teniente Ripper se replantease lo del tabaco. Me apetecía un pitillo un montón...

Doy un par de sorbos a mi taza de chocolate antes de tomar la palabra.
- Sí que me interesaría examinar esos cuerpos Teniente Bécquer. Por otro lado quisiera dejar constancia de la importancia de derivar toda persona con conocimiento científico al laboratorio para las taréas de investigación en vez de darles un arma.
Miro hacia la señortita Vanesa.
- Señorita Vanesa, ¿Como representante civil podría usted elavorar una lista de toda persona que se ajuste a estos parámetros? Siento meterle prisas, supone algo de extrema urgencia para mí.
Vuelvo a dirigir mi mirada al Teniente Bécquer.
- Otro tema de vital importancia es la comida, necesitamos hacer un cálculo, por el momento aproximado, del consumo y las posibilidades de conseguir alimento en los edificios adyacentes a la base. Siento comunicarle Teniente Bécquer que nuestras reservas de medicamentos son muy escasas, me opongo a la libre distribución de antibióticos. Si han de dispensarse, que sea de forma controlada por un sanitario y sólo a aquellas personas que lo necesiten. También me opongo al asunto del tabaco, somos totalmente incapaces de garantizar un suministro constante de esta droga a no ser que sea mediante hallazgos totalmente fortuitos en algún saqueo o encontremos una tabacalera, perdón por este último sarcasmo. La introducción de una droga entre los civiles de la que no hay continuidad más allá de los tres días sólo producirá trifulcas, peleas y pillajes entre los adictos, que los hay, puedo garantizarles que de todos los fumadores de la base saldrá uno con ganas suficientes como para hacer alguna locura si esta le garantiza una dosis de nirvana. Sin embargo, si argumentamos una razón lógica por la cual no queda desde ya mismo tabaco, y esta es que ya no queda nadie que lo fabrique, los civiles se harán a la idea antes y de mejor manera que si se ubiesen acabado las existencias de forma repentina. Puede que tengamos algunos casos de abstinencia moderada o severa, pero el problema no irá a más.
Hago una pausa para reflexionar sobre lo que digo mientras doy un trago a la taza, hay algo que no está del todo bien.
- Al margen de mi opinión, soy consciente que los civiles tienen que estar tranquilos y sobre todo contentos, por eso estoy dispuesto a aceptar una solución parcial en este asunto aunque les insto a tener presentes mis palabras, pero no puedo aceptar medias soluciones en lo que a los antibióticos se refiere.
Doy otro trago mientras espero el aluvión de respuestas.

-Bien, si quiero que participe en el equipo sargento. Quiero a esos civiles con el entrenamiento básico. Asalto, reconocimiento y destrucción. Nos servirán de apoyo para montar equipos que saqueen los edificios de alrededor para encontrar suministros.
En cuánto al asunto de los antibióticos estoy de acuerdo. Intentaremos ampliar el fondo de medicamentos pero será el Doctor Sera el encargado de repartirlos y sólo en casos necesarios. También tengo que decir que los combatientes tendrán prioridad sobre ellos. Lo de los preservativos, tal vez tenga razón Sargento Black, no queremos que haya "descuidos" en ese asunto.
Inclino vagamente la cabeza en dirección a Selene en gesto de apoyo.
-Por el asunto del tabaco tiene usted razón Doc. Pero los mismos problemas pueden surgir ahora mismo por la falta de cigarrillos y quiero a los civiles calmados. Si se encuentran cigarrillos, se traerán y se establecerá un racionamiento cómo el de la comida. Sólo un cigarrillo al día y sólo mientras pueda mantenerse el suministro. Espero su ayuda para hacérselo entender a los fumadores Doc. No toleraré ninguna falta de disciplina por ese asunto.
El personal con cualidades científicas o médicas será llevado con usted o con el Doctor Sera.
Bien, si no hay ningún asunto más, todo en marcha.
Sargento Hartman, tiene 20 minutos. Quiero transporte por tierra, nada de helicópteros. Dos UROS y un par de camiones.
Doc, ¿puede acompañarme a mi habitación?.
Haciendo un gesto a Lanya, Ripper sale de la sala de reuniones sin decir nada más.

Selene se puso en pie a la vez que el Teniente y se marchó a preparar su equipo con un saludo.
Ya no le quedaban muchos hombres del grupo inicial y eso le dio que pensar. Cuándo encontró al soldado Brooks le dijo que comunicase a sus otros dos compañeros que preparasen un camión y su equipo, incluyendo los trajes MOPP. Selene no quería contagiarse por tocar los fluidos de aquellas cosas.
Después Selene cogió un walkie y les dijo a los francos del tejado.
-Aquí Madriguera a Nido. Vamos a limpiar el estropicio de la calle. Espero que tengáis los ojos abiertos y no dejéis que ninguna de esas cosas nos coma el culo, corto.
Después se fue a preparar su equipo pensando, por milésima vez en la ojeada al trasero de Ripper al salir de la sale. Simplemente, legendario.

Me levanto tras dar por finalizada la reunión y sigo al Teniente Bécquer. Acabo con la taza por el camino y como no sé muy bien dónde dejarla la sumo al equipo de investigación. Llegamos a una habitación que parece ser la del Teniente Bécquer. Cierro la puerta, me siento en una de las dos sillas que hay al lado de una mesa y dejo el equipo en una de las esquinas de esta.
- Teniente Bécquer, soy todo oídos.
Reparo que aún no me he quitado la bata ni mis credenciales del CDC.