Una vez que todos están a salvo, transmito la orden de avanzar a través de la radio.
En cabeza se sitúa el Rebeco, después mi BMR (conmigo en la torreta), seguido del BMR de Hartman, después la Boxer con los civiles, muy seguida de cerca por el Nissan Patrol con los antidisturbios (creo que los hemos olvidado hace tiempo) y después los UROS de los Z.O.R.T.
Bajamos intentando esquivar todos los coches, chatarra y zombies que podamos, pero siempre lo más rápido posible. Al igual que Hartman, disparo contra los zombies que se pongan delante del convoy para que no haya ningún problema en el viaje hasta la base de La Salle.

Porfin nos largabamos de esa mierda. ^
Con un rugido del motor la columna emprendío la marcha mientras los artilleros de la torreta repelíamos a los zombies que se acercaban demasiado a los vehículos.
Sin nada más que hacer, disparé a los zombies más cercanos, cuidando de ahorrar el máximo de munición posible.

Nos llevo un largo tiempo recorrer todo el colegio, las aulas todavía decoradas con los trabajos de los niños, había libros de texto en los pupitres e incluso algunas pizarras todavía tenían escrita la lección en ellas. Terminadas las aulas, entramos en lo que erá el salón de actos del colegio y después en toda la zona administrativa, que estaba bastante desordenada a decir verdad, más tarde subiendo unas escaleras pudimos recorrer un corredor que tenia puertas tanto a la derecha como a la izquierda, probablemente fueran las habitaciones de los hermanos de la salle, también diversas salas de descanso y una amplia biblioteca probablemente de uso privado, únicamente para los hermanos, con libros de literatura, poesía y obras de teatro, una gran fuente de cultura, pensé.
Nuestros pasos nos condujeron hasta lo que parecía ser la salida hasta la azotea de la zona residencial, desde allí se podía observar bastante bien gran parte de la "Avenida del Cid" y las zonas colindantes al colegio.
El grupo y yo, decidimos quedarnos un momento para observar la situación a lo largo de toda nuestra zona de visión.

JOTA
Desde la azotea véis la Avenida del Cid bastante bien.
No hay mucho que contar, la calle esta vacía, con varios coches cruzados y volcados, uno de ellos en llamas.
Muchas cosas como marquesinas de autobuses, papeleras o farolas están destrozadas.
Podéis ver a un par de zombies que deambulan sin sentido bastante lejos de vuestra posición. También hay varios cadáveres tendidos en diversos puntos de la calle. La pequeña zona de entrada secundaria al colegio también está cerrada.
Mientras a través de los walkies seguís oyendo el combate del puente de San Pablo.
-¡Joder, el tejado está lleno¡ ¿Como coño han subido?
-Behemoth, aqui Delta-3. No podemos contenerles. Solicitamos apoyo terrestre.
-Behemoth, aqui equipo de tierra. Hemos abatido a 6 civiles que intentaban tirar la valla.
-Equipo de tierra, aqui Behemoth, continúen. Delta-3 autorizado el fuego indiscriminado. Repito, eliminen a todos los que están cerca de un zeta. ¡A TODOS¡
-¿Señor? Pedimos confirmación de orden.
-Aqui Behemoth, destruyanles a todos. Fénix-1, limpie la calle.
Mientras, vés como una columna blindada llega por la calle esquivando vehículos, justo delante del Colegio.
La columna está compuesta por vehículos de combate medio del ejército y UROS de color negro, así como algún vehículo de las fuerzas de seguridad del estado. (Guardia Civil)

HARTMAN, SELENE Y RIPPER

Hartman y Selene, conseguís un logro. Por postear 25 veces ganáis 5 puntos de Zombie Invasion cada uno. Debido al continuo movimiento os es más difícil impactar con las ametralladoras montadas. Aún así, Ripper abate a 6 zombies y consigue 90 de exp. Selene se carga a 4 zetas y consigue 60 de exp. Hartman también se carga 6 zombies y consigue 90 de exp. Además el percutor hace el típico ruido de vacío al haber acabado el tambor de munición de la ametralladora de Hartman.
Rápidamente, esquivando ocntenedores, cadáveres y coches en llamas, llegáis a la puerta del colegio La Salle. La puerta del patio está cerrada y paráis los vehículos justo delante, esperando que alguien os abra la puerta. En pocos segundos, dos zombies que había cerca de allí, empiezan a ser atraídos por el ruido de los motores a vuestra larga columna de vehículos.

Tras algunos minutos de viaje, llegamos a la citada base, que en primera apariencia solo era un colegio.
La columna se detuvo y los frenos de los pesados vehículos resonaron por toda la calle. Sólo había algún que otro zombie desperdigado, peligro distante.
El ambiente estaba viciado debido al olor penetrante de la gasolina en llamas.
-Soldado recargue la 240, el convoy parará unos minutos, vigile el perímetro- Dije al conductor a través del hueco de la torreta.
Recojo mi equipo y bajo del blindando corriendo hacia la puerta de la valla del complejo para comprobar si ésta se podía abrir.